Capítulo 21: Happy Birthday

Lu, levánte de una buena vez, se te va hacer tarde.
-5 minutitos más
-Lu... Vamos, ya han pasado 5 minutos desde la última vez, levanta ya.
-Pero ahora si va enserio, 5 minutitos más.
-¡Carajo ya levantate de una buena vez mierda!
-Y luego preguntas que de quién aprendo esas palabrotas. Ya ya, ya me levanté.
-Muy bien, princesa durmiente.
-Es bella, no princesa. –Corrigió de inmediato, algo malhumorada por la interrupción abrupta de su sueño.- ¡Dios! ¡Eduardo! -cogió rápido el celular entre sus manos y se lo puso en la oreja- Alo? Alo? -dijo en voz alta- Claro Lu, te va a estar esperando a estas horas de la mañana, estúpida que te pones. -comentó renegando consigo misma-
-Deja de hablar contigo misma y cámbiate de una vez, no vas alcanzar a tu primera clase.
-Ya voy, ya voy. -Rápidamente se puso un pantalón y un polo, se hizo una coleta en lo alto, sus medias y zapatillas y listo -
-Te lo comes de camino, andale, apresurate.
-Pero qué prisas tienes de que me vaya ¿eh?-Tomó la motocicleta entre sus manos y se enrrumbó a la calles, gracia a Dios el tráfico no era del todo un asco y pudo llegar a tiempo a clases, al ingresar, encontró una sonriente Sandra con un montón de paquetes en la mano- ¿Te fuiste de shopping antes de venir a clases o qué onda?
- No seas boba, los compré ayer. Esto es para ti, y esto también y esto y esto y esto, todos estos. ¡FELIZ CUMPLEAÑOS, LU!
-¿Mi cumpleaños?
-No me digas que lo olvidaste de nuevo. Eres el único ser humano que conozco que olvida cuando nació.
-Pero es que no le veo lo relevante.
- Como que no, naciste.
- Sí, pero como yo, muchos.
- Ñeeeeh, no se puede contigo. Sólo no olvides todos mis regalos cuando sea el mío.
-Jajajaja sabía que algo oscuro había de por medio.
-Ahora todos a cantar, haaaaaaappy birthday.
-Calla, quién quiere saber.
- Toooooooooo you, haaaaaaaaaaappy bithday. -Continuó Rodrigo-
- Yaaaaa, parenla, parenla. -Dijo mirándolos a ambos-
-tooooo you -Siguió Khimayra que se adentraba en la clase-
-Maldita sea ¿Ves lo que ocacionas?
-Ush, pero si todos andamos cantando bien padre, bien acá. ¿A poco no?
-¿Salimos después de clases a celebrar? -intervino Rodrigo-
- Me parece una maravillosa idea, así hago más amigas. -Concluyó una entusiasta Kimi-
-Por mi no -el celular comienza a sonar- Un segundo. -Dijo con una sonrisa en los labios- Alo?
-¿Cómo puede ser posible que te olvides de mí? Eres de lo peor. Tengo algo lindo para ti y no acepto un NO por respuesta.
-¿Mau?
-¡Guau! Diría yo.
-Hahahaha tarado, eres tú. Pues va, pero después de clases voy a salir con unos amigos.
-¿Con qué amigos?
- ¿Celoso?
-Para nada, linda. Sólo que... ¿Qué pasa si alguno de ellos es un violador encubierto? ¿No has visto ése programa de "mi amigo asesino"?
-Qué paranoias las tuyas, mejor te nos unes y luego de eso ya nos vamos a donde sea que tengas planeado.
-Eso me sabe mucho más rico, entonces paso por ti o...¿Dónde nos vemos?
-Vente para mi universidad y de aquí ya nos vamos.
-Como digas, preciosa. Hablamos luego, ya entró el profesor.
-Hasta luego, Mau.
- Y bien... -Dijo Sandra con una mirada inquisidora-
-Hoy vas a conocer al otro chico del bar. Saliendo de clases les presentaré a un amigo -Le dijo a los otros dos muchachos-
-Más amigos, genial. -Dijo Kimi-
-Más competencia -Susurró Rodrigo-
-No seas pendejo -Dijo Lu en dirección al muchacho-
-Sólo bromea, no le hagas caso, todos saben que está eternamente enamorado de mí. -añadió una risueña Kimi-
-Creo que es al revés, ella es la que vive locamente enamorada de mí.
-Te entenderás muy bien con Mau, ambos son un par de egocéntricos.
-¿Ya puedo iniciar mi clase o les falta aún?-Ironizó el docente con sarcasmo-
-Disculpe, profesor. -Corearon en grupo y se fueron a sentar en medio de risas detenidas.-
-Las horas realmente fueron eternas con el nuevo profesor de circuitos, no es que no supiera de lo que hablara sino que simplemente decía todo como si fuera algo previamente memorizado y no le daba ningún tipo de entonación ni emoción al tema tratado, por su parte, creía fielmente que si Eduardo hubiera estado al frente... En definitiva hubiera captado en algo el contenido del tema, por lo menos él era dinámico y la información no era lanzada cual paporreta-
-¿Cómo es él?
-¿Cómo es Quién?
-Ya sabes.
-Ya te conté, es lindo.
-¿Te gusta?
-Es simpático.
-Pero... ¿Te gusta?
-Eduardo sigue aquí –Dijo señalando su pecho-
-¿Me lo quedo yo?
-¿Desde cuándo tan hetero?
-Hay que probar de todo un poco.
-Me sorprendes.
-¿Eso fue un sí?
-No.
-Entonces te gusta.
-No.
- Entonces ¿Por qué no?
-Porque... No sé.
-Te está llegando a gustar.
-¿Fue pregunta o afirmación?
-Afirmación.
-No lo sé, no sé nada, no insistas, mujer.
-Jajajaja Ay Lu, ay Lu.
- Srta. Basurco ¿Me puede decir que le resultó tan gracioso? ¿Puede compartir el chiste con la clase?
-Va, pero si no ríen es porque son unos amargados.
-Sandra, el profesor anda siendo sarcástico. –Advirtió Khimayra-
-Oh... Lo siento profesor.
-El profesor sólo movió la cabeza en signo negativo y las risas por parte del resto de la clase fueron contenidas. Los minutos siguieron pasando cruelmente, o quizás como habitualmente lo hacían pero cuando uno anda aburrido, los segundos parecen eternos.-
- ¡Cambio de hora! –Medio salón salió de la clase para sentir libertad antes de que ingrese el siguiente ruedo.-
-Señoritas y caballeros, el profesor de la siguiente y subsiguiente hora, tienen permiso de la dirección para ausentarse por andar en un curso de capacitación, ya pueden regresar a sus casas –Anunciaba la secretaria con cara de pocos amigos-
-¡LIBERTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAD!-Exclamaron Kimi y Rodrigo a la vez-
-Qué exageración. –Combinaron a decir Lu y Sandra-
-¿Saldremos verdad? Tenemos más tiempo ahora que las clases se han suspendido.
-Sí sí, pero mejor nos vemos allá, voy a dejar todas estas bolsas en casa para poder andar cómoda. Denme un segundo para planear cómo haremos. –Lu tomó su celular y marcó el número de su mamá- Ma ¿Estas en casa?
*Sí hija ¿Qué pasó?
*Oh no, nada malo, es sólo que quiero ir a dejar unas bolsas a la casa pero no tengo llave, voy de camino ¿Va?
* No no, no vengas.
* ¿Por qué?
* Porque ya voy de salida al hospital.
* Hoy no te toca turno
* Es que cambié una guardia.
* Déjame las llaves en el tapete entonces.
* Eso es peligroso, mejor deja tus cosas en casa de Sandra y ya en la tarde que regrese a casa, las traes.
*¿No que te toca guardia?
* Guardia diurna.
*Aaaah, bueno, está bien, no hay problema, quizás llegue un poco tarde.
* ¿Qué hora es tarde, muchachita?
*Antes de las 6 de la tarde, saldré con unos amigos.
*Entonces en la noche soplamos la torta, feliz cumpleaños hija.
*Sé que también lo olvidaste, es de familia, gracias mamá, llego luego.
-Al terminar la conversación, habían 3 pares de ojos que la miraban atentamente- Me dan miedo. -Susurró- ¿Dónde es que planeamos ir?
*Khimayra dice que conoce un bar muy bueno y que está abierto desde las 9, de repente podemos brindar un rato, incluso dice que como no hay mucha gente a esta hora... Podemos poner música y bailar.
-No suena mal ¿Dónde queda ése bar, Kimi?
-Por la calle Estados Unidos, la primera cuadra, es el único local pintado de negro.
-Va, llamaré a Mau para avisarle dónde andaremos.
- ¿Y si anda en clases? –Repuso Sandra-
-Tienes razón, le dejaré un mensaje entonces. ¿Tienen vehículo?
- Rodrigo tiene un coche, podemos ir en el. –Exponía Kimi-
-Traje mi motocicleta, pero Sandra y tú pueden ir en el coche, yo los sigo.
-Nunca me he subido a una motoneta ¿Puedo ir contigo?
-Si quieres, no me hago problemas Kimi. ¿Vas con Rodrigo, bitch?
-Si sí, quiero ir en coche.
-¿Tienes algún problema con ello Rodri? –Preguntó Kimi-
-En lo absoluto, el auto ya extraña llevar nenas.
-Sí, te entenderás de maravilla con Mauricio.
-Ambos salieron del estacionamiento de la universidad, Khimayra con Lu en el vehículo de 2 ruedas y Sandra con Rodrigo en el convertible negro de éste. –
-So... Cuéntame de ti, Kimi.
-No soy muy interesante, tengo un hermano mayor, una familia bien acomodada, me gustan las niñas, jugar volley, bailar, cantar, y eso es todo.
-Momento ¿Te gustan las niñas? ¿En qué sentido?
-Soy lesbiana.
-Uhúm, con que en ése sentido.
-No te preocupes, que no me voy a enamorar de ti ni cosa parecida.
-Jajajaja no tienes por qué mencionarlo, no eres la única con esas preferencias.
- Hablas de que a ti también...
-Oh no no no no, no no.  Me refiero a Sandra, a ella también le gustan las niñas, pero ellas es como que... Bisexual ¿Si me entiendes?
-Oh sí, claro que lo entiendo. Interesante, quién lo diría.
-Pues sí, así que fresh, no te hagas rollo, Sandra y mi persona somos bien Open Mind
-Me alegra, porque hay gente tan cerrada que le dices eso y puff, se espantan, como si tuvieras alguna enfermedad mortal o cosa parecida.
-Sé que no es fácil, pero con que tengas dos locas buenas amigas es suficiente ¿Verdad?
-Por supuesto, igual y me entiendo súper bien con los chicos.
-Si lo noté, para llevarte bien con Rodrigo... Debes ser un ángel.
- Jajajaja es que Rodri es la persona más dulce que puedes conocer, tal vez parezca pedante y muy seguro de sí mismo pero naaaah, apariencias. En realidad él es ése tipo de chico con el que puedes ir de compras y te aguanta, contarle algo y no lo revela así lo anden matando, es un buen tipo, ya lo vas a conocer.
- Asi que es una cajita de pandora también. Llegamos, es aquí ¿No?
-Exactamente, mete tu moto aquí, es un mini garaje
-¿Pertenece al local?
-Sí, además el chico del local es mi amigo, ni te cobrará por el estacionamiento.
-Genial, entremos entonces.
-Al ingresar a dicho establecimiento, pudo notar un ambiente sombrío, todo estaba oscuro, como si de la misma noche se tratara, no le asombraba el hecho de que llevara como nombre "The Dark Side" o en español, el lado oscuro. - ¿Estas segura de que este sitio es legal? –Cuestionó Lu con algo de intriga.- Jajajaja obvio sí –Dijo Khimayra sin poder retener una pequeña risa- Rodri, Sandra, por aquí. –Dijo agitando sus manos-
-Ya te vimos, Kimi, ya te vimos. –Replicó Rodrigo rodando los ojos-
-Ya, señor seriedad.
-¿Dónde dejaste el auto?
-En el estacionamiento del frente.
-Ok, so... ¿Qué se te antoja beber, Lu?
-Se lo preguntas a la persona que con las justas bebe ron con coca cola, o uno que otro coctel, aquí la maestra soy yo. –Intervino Sandra-
-Discúlpame pues, ebria.
-Tengo cultura etílica, amiga mía. Sabiendo que a las mujeres les gusta las bebidas dulces... Un Baylis para nosotras tres, y para el señor aquí presente, pues no sé de sus gustos o preferencias.
-Las prefiere grandes y gruesas –Anunció Kimi haciendo que explotaran en risas, salvo el aludido, claro estaba-
-JA... JA... JA!
-¿Pensabas iniciar sin mí? –Aquella voz entre divertida y varonil hizo que los cuatro se voltearan en dirección de dónde provenía.-
-¡Mau! –Lu se puso de pie y fue a recibirlo con un abrazo-  Pensé que tal vez andabas en clases.
-Andaba, pero faltar a una clase no me hará reprobar el año así que... Aquí me tienes, linda.
-Estás loco, debiste asistir.
-No cumples un año de vida todo los días.
- Si pero...
-Shhh, ya estoy aquí.
-A continuación se escuchó un pequeño carraspeo departe de Sandra- Hola, nosotros aquí, bien. ¿Cómo va todo por allá?
-Jajajaja, ya los iba a presentar. –Dijo Lu defendiéndose del irónico tono de voz de su amiga- La loca que ves aquí, es Sandra. Con la que supuestamente debías hablar el día que me llamaron. Ella es Kimi, estudiante de intercambio, en realidad la conozco desde hace poquito pero ya es parte del team, y el  muchacho aquí presente, es Rodrigo, tan o más arrogante que tú.
- A mí nadie me gana en arrogancia. Ok, no, Hola, soy Mauricio, conocido de Lu, futuro enamorado, novio y esposo.
-La ajena sólo le palmeó un par de veces el hombro y lo invitó a sentarse a su lado-
- ¿Qué te vas a Pedir, Mauricio? –Cuestionó Sandra mientras hacía un escaneo disimulado del aspecto ajeno-
-Una cerveza está bien para mí.
-¿Tú Rodrigo?
-Una cerveza para mí también.
-Kimi levantó la mano para que su amigo de la barra se acercara- 3 baylis y dos cervezas ¿Va? –El contrario asintió y fue a preparar el pedido-
-¿Qué les parece si para hacer ameno el asunto comentamos alguna anécdota que nos haya pasado? –Sugirió Sandra-
-Me parece buena idea, yo empiezo. Me acuerdo que un día salí de compras con mi sobrina, ella apenas tendría 3 o 4 años y no sabía pronunciar bien las palabras, para ése entonces había un personaje que le gustaba mucho, Pucca, esa muñequita que no hablaba y andaba obsesionada con un niño llamado Garu o Caru ¿La han visto? Bueno, la cosa es que cuando fuimos al mall, ella vio a esa niña hecha peluche y quería que se la comprara, le dije que no traía dinero y la condenada se escabulló entre mis brazos y se fue corriendo hacia el aparador donde andaba una chica muy guapa y comenzó a decir "Tío, la Puta Puta, ahí está la puta" –Unas cuantas carcajadas se escucharon -Yo no sabía dónde esconder el rostro, toda las personas que estaban cerca se voltearon a ver a la señorita que detrás del mostrador estaba. Ya se imaginarán la mirada de odio que me echó cuando estuve cerca para tomar a mi prima entre mis brazos. Queremos la Pucca –Le dije- Y es así como después de la vergüenza,  mi sobrina consiguió su Pucca.
-Sin duda una niña muy hábil. –Dijo Sandra con una sonrisa en los labios-
-Concuerdo con ello, pobre chica, quedó como la Puta para medio centro comercial.
-Yo la sigo, yo la sigo, lo mío no es una anécdota graciosa, es más como una historia creppy, ni tan creppy, pero ahí les va. –Estaba a punto de iniciar su relato cuando las bebidas de todos llegaron, todos les dieron un sorbo un antes de seguir escuchando- Se había celebrado el cumpleaños de mi prima en casa, y como buen cumpleaños, pues había sobrado torta, caramelos, y un montón de bocaditos en general. Ése día estábamos con la nana y le dije que me diera las llaves de la sala para sacar unos cuantos para todos, ella accedió y dijo que no me demorara, la cosa es que fui corriendo hasta la sala, llevé una bolsa y comencé a meter un montón de cosas en ella, a los segundos escucho que la puerta de a lado se abre, la puerta del comedor. Una vez que escucho eso, agarré mi bolsa y cerré la puerta de la sala, cuando voy al cuarto continuo, me encuentro con la puerta abierta. ¿Nana, estas aquí? Consulto sin éxito "Nana, no es gracioso" digo adentrándome más, luego escucho una pequeña risa, como si anduvieran jugando conmigo, pero no parecía venir de la habitación en donde estaba sino de la sala, teniendo un poco de miedo, voy corriendo hacia la habitación con mi bolsa de caramelos, mi nana y mi prima andaban jugando tal y como las dejé, esa noche no había absolutamente nadie más en la casa que nosotras tres.
-Eso me causó escalofríos –Dijo Kimi-
-Yo regresé pálida a la habitación –Admitió Lu-
-Entre trago y trago,  anécdotas sobre anécdotas, y risas con carcajadas,  el tiempo se pasó literalmente volando, después de un par de horas cada quién decidió de que era tiempo de volver a casa, pagando su cuenta cada uno, salieron del bar. Al salir, pudieron notar que el tiempo en verdad se les había escapado de las manos, todo estaba oscuro, el sol ya se había escondido. Instintivamente todos miraron el reloj- 6 de la tarde, joder.
-Cómo pasa el tiempo.
-Me la pasé muy bien, gracias Lu.
-No tienes nada que agradecer, Kimi, gracias por acompañar.
-¿Me llevarás a casa? –Le preguntó Sandra a Mauricio con una mirada coqueta-
-Qué rápido coges confianza –Dijo Lu frunciendo el ceño-
-No te pongas celosa, linda. –Apaciguó Mauricio-
-¿Quién anda celosa?  -Replicó Lu-
- JAJAJAJAJAJAJA –Echaron a reír todos-
-Me encantaría, Sandra, pero en esta ocasión tengo que llevar a la señorita aquí presente a un lugar que le tengo preparado.
-No te preocupes, Lindo. Rodrigo me lleva
- ¿Yo? –Replicó Rodrigo-
-Sí, tú nos llevas. –Insistió Kimi-
-Bueeeh, andando.
-Todos se despidieron con un beso en la mejilla, segundo después Lu  se encontraba sacando su motocicleta del estacionamiento-
-Anda, sube, tú guías, yo manejo.
-No no, señorita, usted se venda los ojos y yo manejo.
-Ay no... Tú manejas cual rápidos y furiosos. Además mi chica sólo puede ser manejada por mí.
-Y por mí, ahora.
-No, Mau.
- Sí, Lu.
-Es que nunca dejo que nadie la maneje salvo yo.
-¿Dejaste que él lo hiciera?
-¿Quién?
-ÉL
 -Ah... Bueno...
-Déjame también, dame tu voto de confianza.
- Vale Vale, pero juro que eres hombre muerto si haces que mi chica se haga daño.
-También manejo una motocicleta, no se te olvide.
-La manejas como si huyeras de una patrulla policial.
-Es que nos gusta la adrenalina.
-Cediéndole las llaves, se montó en la parte trasera de su vehículo- A todo esto... ¿Dónde está tu motocicleta?
-En el taller.
-¿Qué? ¿Qué le hiciste?
-Sólo le andan cambiando el aceite, pero igual ya no tuve tiempo de pasar por ella.
-Ah, bueno. Otra pregunta ¿Cómo sabías que era mi cumpleaños?
-Me tienes en Facebook
- Ahora todo tiene sentido.
-¿Alguna pregunta más?
-Sí  ¿A dónde iremos?
-Ya verás.
-Mauricio seguía conduciendo por la autopista mientras Lu mantenía los ojos cerrados desde que éste le indicó que lo hiciera, por alguna razón, confiaba en él y se sentía bastante segura a su lado.- Ya llegamos, pero no los abras aún. –Una vez que Lu se bajó, y que éste también lo hiciera, acomodó la motocicleta a un lado y tomó de la mano de la misma para caminar hacia adelante, abrió lo que parecía ser una puerta por el rechinido que causaba, se encendieron las luces y una multitud gritaba- "SORPRESA" –Adelante estaba su madre, cómplice segura de las locuras de Mauricio, ahora todo cobraba sentido, por eso no quería que fuera a dejar las cosas en su casa y el invento de su supuesta guardia, Sandra y sus instintivas ganas de conocer a Mauricio, Kimi Y Rodrigo, quienes le guiñaron un ojo, Bastian y Hassel, quienes le miraban de forma divertida, y personas del resto de la clase de su universidad.- Co...
-No preguntes ni cómo, ni porqué, solo disfruta tu fiesta. –Dijo Mauricio con una sonrisa en los labios, luego del pequeño gran shock, todas las personas en la habitación se acercaron a saludar y a darle un beso en la mejilla, expresando uno que otro deseo-
-Bien... No sé cómo, ni porqué, y en verdad no lo hubiera imaginado jamás, solo resta decirles que gracias por estar aquí y... ¡QUE COMIENCE LA FIESTA! –La música comenzó a sonar al mando de un dj ubicado estratégicamente en una esquina, un poco de alcohol y bocaditos también eran pasados de mano en mano-
-¿Te gustó la sorpresa?
-Estás demente, Mau. ¿Cómo le hiciste?
-Tu loca amiga fue mi cómplice. En realidad no me enteré por Facebook, ella se las arregló por contactarme y pues mandamos a arreglar todo para hoy, tu mami también fue de gran ayuda. Ah, y ya me dice "Hijo" No sé tú pero tu mamá me quiere de yerno.
-Jajajajajaja, si Mau, como no.
-Oye hijo, ayúdame a preparar más de esa cosa que toman. –Dijo la Sra. Roxanna-
-Te dije. –Dijo Mauricio guiñándole un ojo y yendo ayudar a la mujer-
-Joder...
- Lu Lu Lu Luuuuuuuu –Se acercaba corriendo Hassel en medio de la multitud, estando cerca se echó a sus brazos y la apretujó con fuerzas- Tú, pequeño ratón ¿Cómo es que te contactaron?
-Pues una chica me llamó, Sandra, creo. Me dijo que harían party en tu casa por tu cumpleaños, del que por cierto no sabía nada, jum.
-Ni yo me acordaba, cariño. Si lo recuerdo cada año es porque la loca que tengo como amiga, me hace memoria del mismo.
- Y a ¿Bastian cómo le ubicaron?
-Pues yo lo invité.
-Sí, porque de él no tengo el número.
- ¿No te molesta no?
- Claro que no, en lo absoluto, Bastian es bienvenido a esta casa las veces que quiera, así como tú.
-Diviértete Lu, voy a bailar con mi chico.
-Ve, pequeño. –Apenas Hassel se fue, Rodrigo se acercó con una pequeña sonrisa- ¿Bailas? –Cuestionó el mismo- Sí, también camino, canto, juego, salto, brinco. –Rodrigo soltó una pequeña carcajada- Que si te gustaría bailar conmigo. –Comentó nuevamente- Ah... Claro que sí. –Yendo un poco más hacia el medio, ambos comenzaron a bailar al ritmo de la música, el muchacho no se movía nada mal, debía de admitir. Un poco de electro, reguetón, salsa y ahora venía a sonar una preciosa bachata.-
Qué bien te vez, te adelanto no me importa quién sea él. Dígame usted, si ha hecho algo travieso alguna vez. –Y ahí estaba Mauricio, haciendo acto de presencia en el momento exacto y con la canción perfecta.- Te la voy a robar. –Le advirtió a Rodrigo, tomando de la cintura a la contraria y comenzando a moverse al sensual movimiento de aquella bachata- Una aventura es más divertida, si huele a peligro. Si te invito a pasear y me acerco a tu boca, si te roba un besito, a ver, te enojas conmigo. –Dijo el contrario con aquella sonrisa y es mirada que sabía bien, enamoraba a cualquiera- Jajajajaja, me enojé porque fue repentino aquella vez. –Comentaba Lu con gracia- Y si me dieran ganas de besarte ahora –Consultó Mau juntando frente a frente con ésta-
-Disculpen ¿Interrumpo? –Esa voz... Mierda.-