-la
muchacha sólo atinó a dedicarle una gentil sonrisa mientras se adelantaba para
entrar al establecimiento, desde atrás escuchaba una voz diciendo “Espera,
preciosa” cosa que por supuesto no la detuvo y siguió caminando hacia delante.
– ¿Siempre eres así? –cuestionó el muchacho que corriendo se detenía a su lado
- ¿Así como?-Replicó la misma- Ya sabes, dejas a tus “citas” con la palabra en
la boca, porque si es así… Pobre del muchacho que anduvo contigo. –agregaba de
inmediato sin medir el golpe de sus palabras, la siquiera palabra implícita de
su ahora “ex” hacía que el corazón de la ajena se le comprimiera, y que los
ojos se le hicieran agua, el adverso pudo advertir lo que venía así que se
adelantó y cambió de tema rápidamente mientras la sujetaba por el brazo y la
llevaba a una de las mesas que tenía el local, muy en su mundo, Lu seguía
mirando un punto fijo sin prestar atención a su acompañante-
+Debo
ser una pésima cita.
+ ¿Eh?
–Dijo al fin-
+Me
siento invisible
+Lo
siento, sólo… Pensaba.
+ No preguntaré
en qué porque creo saber la respuesta.
+Gracias.
+Oye, ya,
estás con un chico guapo, hermoso, bello, único, e inigualable al frente tuyo,
al menos mírame ¿No?
+Se te
olvidó lo petulante, presumido y egocéntrico.
+ Al
menos ya me prestas atención, preciosa.
-Una
sonrisa inconsciente salió de los labios de la chica, por más egocéntrico que
pudiera ser aquél sujeto, debía reconocer que le hacía sentir mejor, no tan
sola, al menos algo positivo había salido de aquella salida con Hassel y
Bastian, a los minutos llegó un muchacho para tomar la orden –
Un frapuccinno
de Mocha Blanco. –Dijeron al unísono –
+Uy,
tenemos gustos parecidos preciosa.
+Deja de
decirme preciosa.
+Como
quieras, bombón.
+
Tampoco me digas así.
+ Está
bien, cuchi cuchi.
+ Jaja
¿Qué? ¿Quién te crees? ¿Betty?
+ Si tú
eres Pablo Marmol, no tengo ningún problema.
+ Gay
+ Era un
chiste.
+
Tarado.
+
Lindura.
+
Baboso.
+
Belleza
-Un
carrapéo los sacó de su infantil discusión- Eso es todo –Respondió Mauricio
mirando al muchacho, éste asintió y salió directo a la barra para ejecutar el
pedido de ambos. –
+
¿Alguna vez tendremos una conversación sin que haya insultos de por medio?
+ No lo
sé, eres bullyingneable.
+
Agradece que mi autoestima sea alta, sino, ya hubieras sido la responsable de
mi aguda depresión.
+ No es
para tanto, mis insultos van impresos de cariño.
-Después
de unos cuantos minutos, el mismo muchacho de antes traía sus pedidos y los
depositaba en la mesilla. Ambos agradecieron y empezaron a beber de aquél delicioso
batido-
+¿Está
bueno, no?
+
Demasiado, hace tiempo no probaba uno.
+ ¿Qué
más has dejado de probar hace tiempo? –cuestionó el ajeno con una sonrisa
pintoresca-
+
Pegarle un rodillazo en las bolas a mi “cita”
+ Eeeh,
párale ahí, deja a mi descendencia tranquila, luego nuestros hijos no saldrán
tan hermosos.
+
¿Nuestros hijos? En tus sueños, lindo.
+ Cuento
con eso. –Agregaba el muchacho con la misma sonrisa pícara de antes.-
-Después
de terminar con aquello, el muchacho se paró y le ofreció la mano a la ajena
para que se levantara del asiento, La misma lo miró de arriba hacia abajo y se
quedó mirando su aún extendida petición.- Oh vamos, no muerdo. –Suplicó aquél,
haciendo que ella sonriera y accediera a darle su mano, se levantó del asiento
y caminaron hasta donde habían dejado estacionada la moticleta.- +¿Qué te
gustaría hacer ahora?
+ No lo
sé, lo que tú quieras, no ando con demasiada imaginación.
+
Entonces quieres ir a Mall?
+ No, al
Mall no.
+
Entonces algo más rústico, vamos a un lago.
+ No,
cero lagos.
+ Dale,
veamos la ciudad desde el…
+ Ni
siquiera lo menciones.
+ Vale,
un parque de diversiones.
+ No no,
pésima idea.
+ No
pues, así me dejas sin opciones Lulu-
+ Al
menos se te ocurrió un apodo bonito, Lulu
me gusta.
+ Voy
haciendo puntos ¿Verdad?
+ Sigue
soñando.
-El
muchacho algo rendido soltó un suspiro, se rascaba la nuca tratando de pensar
en otra cosas que pudieran hacer pero no tenía idea de qué, inconscientemente
se mordía el labio inferior mientras que miraba a la nada intentando idear
algo.-
+ No
hagas eso. –Dijo la muchacha.-
+ ¿Hacer
qué?
+
Morderte el labio de esa forma mientras posas así y esperas que no una se
derrita por ti por lo adorable que te ves.-Soltó sin pensar-
+
¿Entonces soy adorable?
+ Y/o
insoportable.
+ Así me
vas a querer, nena.
+ Sigue…
+
Soñando, lo sé lo sé. –Rodó los ojos de manera divertida- Oye, ya tengo idea de
dónde es que vamos a ir, pero eso sí, ni que se te ocurra rechazar la idea. Ya
sé, mejor no te la digo para que así no pongas objeción alguna.
+ Bueno,
pero si no me gusta, te golpearé.
+ Y si
te gusta, me besarás.
+ Uhm…
Trato hecho.
-El
muchacho se subió primero y se colocó el casco mientras la ajena repetía
procedimiento- Más te vale que te sujetes fuerte porque iremos a mucha
velocidad.-Añadía el ajeno encendiendo el motor en neutro y jugando con los
aceleradores para que se diera cuenta de la potencia que tenía aquél vehículo-
No puedes manejar a tanta velocidad en plena ciudad, querido. Si te atrapan te
pondrán una multa de padre y señor mío. –Decía la chica intentando persuadirlo-
Ése es el punto, si me atrapan. –Agregaba sin más un antes de poner en primera
y salir cual rayo de allí, los cabellos
de la muchacha volaban al viento, aunque gracias al casco no se le
desordenaban del todo, de igual manera su prenda superior ondeaba como si fuera
una hoja, sus brazos yacían enredados
completamente en la cintura del adverso, no porque quisiera, sino porque el
niño aquél osaba hacer piruetas con ella montada atrás y si no se sujetaba
firmemente, estaba segura de que no la contaría.- Dios. –Susurró muy a su pesar
cuando el chico hacia que la motocicleta avanzara en sólo una rueda y luego
caía para seguir avanzando en dos.- Sea a donde sea que estemos yendo… Espero
que haya un taxi porque olvídate de que me vuelvo a montar contigo. –Agregaba
con cierto pánico, si le gustaba vivir nuevas emociones pero su vida era algo
que apreciaba mucho- Oh, no seas aguafiestas, mientras estés conmigo al
volante, no te pasará nada. –Comentaba con confianza en cuanto se detenía en
una especie de hacienda-
+ Aquí
es donde nos divertiremos.
+ ¿Qué
haremos?
+ Mejor
pregunta qué es lo que no haremos. –Susurraba en doble sentido-
+ Eres
tan… sucio. Me caes bien.
-Por su
parte la muchacha se había bajado para inspeccionar el lugar, sin duda era bonito,
había bastantes árboles, flores y una gran casa hecha de madera, podía ver
hacia un lado unos cuantos animales de granja e incluso lo que creía que era un
establo.-
+ Éste
lugar es sin duda, muy bonito.
+ Lo sé,
mi madre se esfuerza porque se mantenga lo más ecológico posible. Los ruidos de
la ciudad le aturden y sinceramente, a mí también me estresan.
+ Joder
¿Me trajiste a tu casa?
+ Sí, mi
casa es bonita, además, es el único lugar que puedo andar seguro de que no te
llevaron antes.
+ Pues
sí pero… ¡Qué rollo! tu mamá, papá, tu familia, yo soy una desconocida.
+ Ni te
apenes, no es la primera vez que traigo alguien a casa.
+ Tan
mujeriego el niño.
+ Me
refería a mis amigos. –Agregaba en defensa entrecerrando los ojos-
-Hijo
mío al fin estas en casa –Salía la madre del muchacho con una sonrisa de oreja
a oreja, sonrisa que de inmediato se le quitó al ver a la chica de alado-
¿Quién es? –Consultó con seriedad mientras la inspeccionaba de arriba hacia
abajo.-
+ Lu del
Alcazar, señora, amiga de Mauricio. –Dijo de inmediato para que la adversa no
se hiciera ideas extrañas en la cabeza.-
+
¿Amiga? Ja! Mamá, ella es mi novia y futura esposa. –Agregaba el otro sin pena,
haciendo inmediatamente que Lu volteara en su dirección. Si las miradas
matasen, estaba segura de que aquél chico ya no existiría.-
-Entonces
eres la novia de mi bebé. –Dijo la señora con una sonrisa bastante amplia, de
pronto era la dama más encantadora del mundo- Ay cariño, es que éste muchacho
me trae cada “Amiguita” a la casa, que andan por aquí tratando de trepársele
encima y además no se miden cuando andan en hogar ajeno. Cómo ha cambiado la
juventud hoy en día. –Agregaba negando con clara molestia.- En fin, pasen
pasen. –Decía la mujer invitándoles a caminar hacia la acogedora casa, Lu había
querido explicar el malentendido pero la madre de aquél había dicho tanto y en
tan corto tiempo que la había dejado media mareada, después de procesar toda la
información, le echó un vistazo a Mauricio-
+ ¿No
que no eran chicas? –Cuestionó en susurro, a lo que él sólo atinó a encogerse
de hombros- Y no soy tu novia. –Decía mirándole acusadoramente-
+
Todavía no, pero ya pronto.
+ Tienes
mucha confianza ¿Eh? Luego se te pasará el capricho.
+ No
eres sólo un capricho.
+ Una
chica a la que sólo has visto una vez y no tienes idea de cómo es, a la que
sólo invitas por quién sabe qué, es un capricho.
+
Corrección, dos veces.
-Soltó
un pequeño suspiro dándose por vencida, justo en ése momento fue que la mamá
del muchacho entraba con un bowl de galletas recién horneadas y dos vasos de
leche - Por favor, siéntense. –Dijo con una sutil sonrisa, Mauricio abrió paso
para la chica y ésta se encaminó hacia los sillones de la pequeña sala de
estar. –
+ Soy
Michelle, es un placer conocerte, Lu.
+ El
placer es todo mío, señora.
+
Entonces… ¿Cuánto tiempo llevan saliendo? –Cuestionaba con claro interés-
+ La
verdad es que llevamos…
-Que
llevamos 3 meses saliendo juntos, ella es una mujer maravillosa–Agregaba Mauricio
con total normalidad, a lo que la chica boquiabierta se le quedaba mirando
anonadada-
+ 3
meses, eso es mucho tiempo. ¿Cómo es que antes no había sabido de ti?
+ Será
porque a su hijo lo conozco apenas hace dos días –Pensaba internamente- Supongo
que Mauricio no quería presentarle cualquier chica, es decir, a alguien con la
que apenas llevara un par de semanas.
-Ahora
era Mauricio quien había quedado boquiabierto, si iban a jugar, al menos el
juego debía ser entretenido ¿Qué podría salir mal?- Exacto, quería conocer
mejor a Lu antes de presentártela, mamá. –El chico le guiñó coquetamente a su
compañera y se acomodó a su lado para tomar de una de sus manos-
+ No te
pases –Dijo Lu en un susurro apenas audible en cuanto tomaba una galleta con su
mano desocupada-
- Eres
mi novia de hace tres meses, silencio. –Agregó en el mismo tono-
+ ¿Qué
tanto cuchichean?-Preguntó la dama-
-Nada
malo, madre. Sólo le decía que quizás después podríamos salir a pasear en los
caballos.
+ Eso
sería una estupenda idea, apuesto a que te gustará, Mauricio es un gran jinete.
Lu ¿Qué estudias?
+ Bien…
Estoy estudiando Turismo y hotelería en la Nacional.
+ Vaya,
una chica inteligente. Tengo entendido que es bastante complicado entrar allí.
+ No lo
es tanto, no lo sé, sólo debes tener determinación y poner un poco de tu parte
para acumular un buen puntaje.
+
Coloqué a mi bebé en la privada porque
sé lo flojo que es.
-Mamáaaaaa
–Exclamó el ajeno-
+ Oh
pero eso no tiene nada que ver, me refiero a que la universidad no hace al
Alumno, sino el Alumno a la universidad, la nacional no tendría prestigio de no
ser por los puestos que sus estudiantes consiguen en las grandes empresas,
incluso hay chicos de la universidad de Mauricio que están ocupando altos
cargos también.
+Linda,
inteligente y buena oradora.
-Yo
también soy lindo y hermoso, y precioso y encantador y…
+ Y
egocéntrico-Concluyeron ambas mujeres, riendo segundos más tarde-
-Así no
se puede. –Bufó el niño rodando los ojos-
+ Ya,
cariño, no te enojes. –Dijo Lu acariciando una de sus mejillas y besando la
misma-
+ Hacen
una hermosa pareja –Concluyó su madre mirando emocionada la escena, al parecer,
no era la única llena de emoción puesto que el chico se había puesto rojo cual
tomate tras aquella muestra de cariño.- Debes traerlo loco porque es la primera
vez que veo que se sonroja tanto ante un simple beso.
-¡Mamáaaaaa!
+Bueno
bueno, los dejo solos, tengo que ir a lavar los trastes y luego planchar las
camisas de mis muchachos.
+ Hasta
luego Sra. Michelle, fue un placer conocerla.
+ Lo
mismo digo, Cariño. Bebé, pórtate bien~
.-.-.-.-.-
.-.-.-.-.- .-.-.-.-.- .-.-.-.-.- .-.-.-.-.- .-.-.-.-.-
+¿Escuchaste
Bebé? pórtate bien.
-Yaaaaah,
para el sarcasmo.
+Me la
debes ¿Cómo es eso de que llevamos tres meses?
+Bueno,
es una mentirilla inocente, mamá suele ser muy intensa cuando son chicas que apenas
conozco, cree que todas me quieren en la cama.
+ ¿No
será al revés?
+ No,
bueno, a veces, cuando era más chiquillo, pero ya cambié.
+ Mjúm, cuéntame
otra de vaqueros.
+ Es
enserio.
+ En
fin, entonces… ¿Ahora soy tu “cariño”?
+ Baaah,
yo sólo te seguía el juego.
+
Entonces sigamos el juego hasta que te vayas de casa
+ Y eso
quiere decir que…
+ Que
pretendas ser mi novia hasta que salgamos de la hacienda.
+ Y yo
qué gano?
+ Hacer
a un muchacho muy feliz.
+
Jajajaja, si serás bobo. Está bien, pero no te besaré~
+¿Puedo
tomar de tu mano?
+ Uhm…
Claro.
-La
sonrisa entre sincera y dulce que poseía el muchacho al cogerla de la mano la
había dejado algo confundida ¿Por qué Eduardo no sonreía así cuando la tomaba
de la mano? ¿Por qué no había conocido nunca a sus padres? ¿Cómo es que no
sabía ni el nombre de su padre o madre?-
+ ¿Hola?¿Lu?
¿Nos vamos?
+ Me fui
por un momento, sí, vamos.
-El
chico la guió por la hacienda hasta el establo, al entrar, le hizo una seña
para que lo siguiera, habían tres caballos; uno que apenas era una cría, era
pequeño con machas cafes y pelaje blanco, el segundo era uno de color negro
azabache, con una mirada bastante profunda ; la última, la última era una
preciosa yegua de color blanco entero con un pelaje precioso –
+Vaya
que son hermosos ¿Cómo se llaman?
+ El de
color negro se llama “Rayo” tiene una impresionante velocidad a pesar de ya
tener sus años encima, la blanquita, ella es “Claro de Luna” le decimos “Luna”
y el pequeño potro… Pues aún no le hemos puesto nombre ¿Te gustaría bautizarlo?
+ ¿Yo?
Oh no, es tu caballo, además, no soy quién.
+ Claro
que sí, eres mi novia. Al menos hasta que salgas de la hacienda.
+
Bien... Entonces quiero la mitad de los bienes, me quedaré con el espacio
abierto y tú puedes quedarte con la casa.
+ Eeeeh,
dije novia, no esposa. Ahora sé que cuando me case tiene que ser por bienes
separados.
+
Jajajaja bromeaba. ¿Qué te parece “Relámpago”? Digo, ya que todos tienen algo
astronómico, éste pequeño no debe ser la excepción ¿O sí?
+ Me
gusta mucho, relámpago será de ahora en adelante.
+¿Estás
seguro de que no te arrepentirás luego? ¿Qué tal si una novia tuya de verdad se
le ocurre preguntar por el origen de sus nombres?
+ No lo
creo posible, igual, terminaremos estando juntos.
+ Esa
confianza tuya. Bueno ¿En cuál andaremos?
+ En
rayo, nos aguantará bien a los dos
+¿Iremos
juntos en uno solo?
+¿Sabes
montar?
+ No
+Entonces
iremos en uno solo -Sacó al caballo y le
puso las riendas y la silla de montar, primero ayudó a la ajena tomándola de la cintura, una
vez que estuvo arriba, espero unos segundos-
+¿Qué
esperas?
+Que te
bote, Rayo no deja que extraños lo monten.
+ ¡Qué! ¡Bájame
entonces! –Exclamaba preocupada-
+ Ya
estás arriba y no ha hecho nada, es buen indicio. –Agregó sonriente dándole un
pequeño beso al animal- Buen chico. –Se subió atrás y tomó las riendas,
haciendo que avanzara a paso lento por el camino dibujado de la hacienda,
cuanto más avanzaba, más podía apreciar los paisajes hermosos que aquél lugar
tenía por ofrecerles, estaba encantada y debía admitirlo-
+Todo es
muy hermoso.
+¿Te
gusta mucho?
+ Más de
lo que te puedes imaginar
+Entonces
reconocer que me debes mi beso.
+ En
definitiva.
+ Lo
quiero ahora.
+Bien,
cierra los ojos. –El muchacho obediente cerró los ojos y frunció los labios
para el supuesto beso, Lu se aproximó a él, dejando un claro y sonoro beso en
una de sus mejillas- No especificaste donde.
+ Eres
una tramposa.
+No,
estaba implícito.
+Bleh,
así no se vale. Al menos que sean dos ¿No?
+ Bueh,
nada pierdo.
-Giró
despreocupadamente la cabeza para dejarle un corto beso sobre la mejilla, cuando
estaba a punto de coincidir con la misma, Mauricio giró su cabeza de forma
rápida, Lu en el último microsegundo que le quedaba se hizo hacia atrás bruscamente
para que sus labios no pudieran coincidir, lo que no tomó en cuanta fue el
estrecho espacio que los separaba a ambos, estaba a punto de caer cuando sintió el ligero
agarre hacia una de sus muñecas, a pesar de aquello, la gravedad hizo su trabajo
y el peso de ambos cedió, Mauricio cayó en el pastizal con Lu encima, dándose
un genuino beso de “Media luna”-
la descripción del beso "media luna" lo fue todo jajaja
ResponderBorrarPdta: creo que copiaste 2 veces el relato chekalo!
besistos buen relato y ya quiero conocer a Mau jajaja
Jajajajaja, es que no tenía idea de cómo describirlo, si ponía "Quedaron besándose la mitad del labio" Pues sonaría extraño skhdnwksd.
BorrarNo, lo que pasa es que es para que lo disfrutes doble vez, okya, mentira, ya lo corregí.
Voy a subir multimedias de cómo es Mau<3 O bueno, cómo lo alucino.